Se abrían así caminos para el encuentro, el diálogo y la amistad.
Señor, haz de mi un instrumento de tu
paz:
Que
donde haya odio, ponga yo amor;
donde
haya ofensa ponga yo perdón;
donde
haya discordia ponga yo armonía;
donde
haya error , ponga yo verdad;
donde
haya duda, ponga yo la fe;
donde
haya desesperación, ponga yo la esperanza;
donde
haya tinieblas ponga yo la luz;
donde
haya tristeza ponga yo alegría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario